Curación de la artritis en la articulación de la rodilla
Sra. A.K. (46) Stuttgart (Alemania)
En el año 1972, empecé a padecer de ataques repentinos de dolor en ambas rodillas (con énfasis en la rodilla derecha), con dolores muy fuertes y punzantes. Estos dolores no me permitían doblar ni tampoco de replegar las rodillas. Estos ataques se presentaban, con una cadencia, de 3 a 4 veces por año y, especialmente en la temporada fría. A pesar de las inyecciones y de las radioterapias, éstos duraban de 1 a 2 semanas. A través de las radiografias me fué díagnosticada una artritis. Desde mi introducción a las enseñanzas de Bruno Gröning, en enero de 1989, yo recibo la energía divina diariamente. Como consecuencia de ésto, los sufrimientos fueron disminuyendo de intensidad y, a partir del mes de diciembre del mismo año, los mismos han desaparecido. Desde esa fecha yo estoy liberada.