Respetar el libre albedrío
Cada uno es libre de elegir su propio camino en cada momento
Según la enseñanza de Bruno Gröning, el libre albedrío es el bien supremo de cada ser humano. El Sr. Gröning dijo: "Puedo ayudar a cada persona a encontrar el camino hacia lo bueno, pero no le puedo quitar la decisión, ni puedo obligarle a hacer el bien. Cada uno ha de encontrar su propio camino."
El respeto de la libre voluntad es la base esencial de la enseñanza de Bruno Gröning dentro del Círculo de Amigos de Bruno Gröning y se realiza de forma consecuente. La pertenencia al Círculo de Amigos de Bruno Gröning no incluye ninguna obligación, ni jurídica, ni financiera, ni religiosa. El vínculo con el Círculo se puede romper en cualquier momento, y por lo tanto se puede comparar con una amistad buena, privada.
La mayoría de los buscadores de ayuda vienen al principio muy escépticos y quieren primeramente convencerse de todo. Bruno Gröning dijo ante esto: "Por favor, ¡no sean crédulos! Hoy digo como siempre: `Ustedes no tienen que creer lo que yo digo´. Tampoco lo exijo. Ustedes tienen una obligación, la de convencerse por sí mismos." Recién con la vivencia práctica de curaciones y ayudas en el propio cuerpo, crece la confianza en las enseñanzas de Bruno Gröning y se fortifica la fe que Dios es el médico más grande. El sentir de la Heilstrom y las experiencias de éxito son para muchos amigos un estímulo para seguir avanzando en el camino espiritual y quieren aprender y vivenciar más.
Llegar a ser el maestro de su propia vida mediante la madurez espiritual
Las enseñanzas de Bruno Gröning tienen como meta que los amigos lleguen a ser espiritualmente maduros y aprendan a ser responsables de sí mismos. Bruno Gröning dijo: "Yo quiero que Ustedes sean los maestros de su vida. Cada uno es el forjador de su suerte, pues lo que el hombre siembra, lo cosechará." Cualquiera puede cometer un error, sin embargo tiene que acarrear con las consecuencias de su cometido, conforme con la ley natural de causa y efecto, según la cual son regidos todos los seres humanos. Pero se pueden tener experiencias propias de forma mucho más fácil y rápida, cuando se conocen las reglas espirituales. Mediante un intercambio regular de informes de experiencias entre los amigos se fomenta un desarrollo espiritual más rápido. "Uno ayuda al otro, y a todos nos ayuda Dios" dijo Bruno Gröning.
